martes, 20 de septiembre de 2011

Día de San Mateo


Las Fiestas de San Mateo de la ciudad española de Logroño tienen lugar en la semana natural que engloba el día 21 de septiembre, día que el santoral dedica al apóstol. Son fiestas de marcado carácter popular, cuyos orígenes se remontan al siglo XII, y que, desde 1956, llevan el sobrenombre de Fiestas de la Vendimia, dada la proximidad a las fechas de recogida de la uva, en una tierra marcada por el vino.

Estas fechas se celebraban originalmente en el día de Acción de gracias, y en ellas los riojanos agradecían la cosecha recogida. Finalmente la fecha se fijó en el 21 de septiembre, festividad de San Mateo, que fue recaudador de impuestos, y que acabó convirtiéndose en patrón de los mercaderes.

La celebración comienza con el chupinazo, cohete que supone el arranque de las fiestas. Desde el balcón del Ayuntamiento, el alcalde de la ciudad, junto a los Vendimiadores Mayores, un chico y una chica elegidos para representar a la ciudadanía en estas fechas, iniciando así las fiestas con un breve discurso y el lanzamiento del cohete que da lugar a los siete días de celebraciones.


Una de las tradiciones más importantes en estas fiestas son los chamizos, locales habilitados por las peñas de la ciudad y por diferentes colectivos, en los cuales se ofrece gratuitamente zurracapote. Se bebe tradicionalmente en porrón, y se ofrece al visitante sin coste alguno, aunque todos tienen su correspondiente botecito por si alguien quiere cooperar.


Durante toda la semana se puede disfrutar de conciertos con grupos de actualidad, gastronomia, desfile de carrozas, corridas de toros, además de un concurso Internaconal de Fuegos Artificiales donde el ganador tiene el privilegio de lanzar la colección de fuegos en las Fiestas de San Bernabé del año siguiente.

Sin embargo el acto principal de las fiestas es la ofrenda del primer mosto, y se realiza justo el día de San Mateo el 21 de septiembre. En él, niños de todas las comarcas de La Rioja llenan con las primeras uvas de la temporada una cuba, para ser pisada y convertida en mosto. Con este primer mosto recogido, se realiza la ofrenda a la patrona de la ciudad, la Virgen de Valvanera.


Para finalizar las fiestas, se realiza la tradicional quema de la cuba, tras un desfile previo de los peñistas por las calles céntricas de la ciudad. Este acto pone fin a las fiestas.


Cordialmente,
Centro Riojano de México, A.C.

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